Los muros en L (sin talón), aun para alturas pequeñas, del orden de 2 a 3 m, dan como resultado del dimensionamiento completo unas zapatas enormes

Al consultar el listado de comprobación se observa que puede ser debido a que el coeficiente de rozamiento terreno-cimiento es estricto, muy próximo al máximo permitido, lo cual indica que el dimensionado está condicionado por la estabilidad al deslizamiento, ya que la estabilidad al vuelco en estos casos va sobrada con un porcentaje de reserva de seguridad elevado. Por esta razón, el programa aumenta las dimensiones de la zapata, ya que necesita peso para aumentar las fuerzas de rozamiento.

Para reducir el tamaño de zapata, en primer lugar se debe revisar el coeficiente de rozamiento terreno-cimiento. El valor por defecto del programa corresponde a un terreno cuya tg (30º) es 0.577.
Puede que el terreno real donde se construya el muro sea mejor. Auméntelo, por ejemplo, entre 0.70 y 0.80 y vuelva a dimensionar la zapata.

Si la zapata todavía resulta excesiva, debe considerar el empuje pasivo activando, en la opción Terrenos > Solapa Intradós > Situación de sobrecarga, el relleno correspondiente hasta la cota del nivel superior de la zapata como cota del empuje pasivo, con el porcentaje de empuje pasivo que permitan las condiciones de contorno del terreno (o de la estructura, si existe), que puede llegar a ser del 100%.

Con estas consideraciones podrá reducir el tamaño de la zapata.

De modo orientativo, las zapatas sin talón tienen una longitud aproximada de puntera igual a la altura total del muro, para terrenos y cargas habituales.